viernes, 30 de enero de 2009

Changuito de mi pueblo

Changuito de mi pueblo, niño que alegre va cantando, por las callesitas de tierra de mi pueblo, callesitas que con cada viento levanta un tendal de tierra, haciendo que por momentos sea casi una tormenta de arena, pero ni siquiera esto hace callar tu canto, canto de felicidad, porque vuelves a tu casa, luego de un duro jornal.
En tu silvido llevas tus penas y tus alegrias, las notas de tu vida, que solo tu changuito puedes cantar. Notas que muestran las tardes de trabajo, en ese campo inmenso, campo donde todas las tardes dejaste volar tu imaginacion junto con un simple cardenal, cardenal que igual que tu changuito, lleva en su sangre el canto. Vuelves a tu casa llevando contigo solo cansancio, el cuerpo curtido por el trabajo, curtido de vivencias de un chango que trabaja para ayudar a su mama, que siempre lo espera junto al brasero, con la pava al fuego y un mate siempre servido, talvez acompañado de una tortilla o quisas un pan hecho con sus humildes manos. Se escucha ladrar los perros, señal que el niño vuelve, y con el regreso esta el final del dia, final de ese dia que le causo solo cansancio, pero apesar de eso nunca aflojo, nunca lo hiso, porque sabe que con su jornal, a su madre podra ayudar, a su madre y sus hermanos, que solos estan. El carga con la tarea del padre, que como herencia le dejo, aquella tarde de enero que pa' el cielo partio. Changuito humilde, changuito de mi pueblo, canta nomas, canta que tata Dios escuchara tu penar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Reproductor